Según información de organizaciones defensoras de derechos humanos como el Comité de Solidaridad, “los internos de 5 cárceles se encuentran en huelgas de hambre o actividades de protesta pacífica”.
Las protestas se estarían llevando a cabo en las cárceles de Cómbita y Barne (Boyacá); Picota (Bogotá); Dorada (Caldas), y Valledupar (Cesar).
Para “que se apliquen de inmediato medidas para enfrentar la difícil situación por la que atraviesan miles de internos en los establecimientos carcelarios del país, mientras se discute el nuevo Código Carcelario y Penitenciario en el Congreso”.
En pabellones 1 y 7, unos 200 no reciben alimento en protesta por las malas condiciones carcelarias.
John Jairo Marulanda, condenado a 38 años de prisión y quien actúa como vocero de los presos, aseguró que únicamente están consumiendo agua potable.
Los reclusos, quienes dicen integrar el ‘Movimiento Nacional Carcelario’, han redactado un pliego de peticiones de seis puntos en el que le piden al Gobierno que “les conceda una rebaja de hasta el 50% en las penas a todos los presos en Colombia, una solución eficaz a la salud y al hacinamiento que padecen los presos en el país, regionalización familiar y procesal, alternatividad penal donde las condenas no superen los 25 años de prisión, participación de los presos en la reforma al código penitenciario y suspender la extradición de ciudadanos colombianos a cárceles extranjeras”.
Prensa Nacional